Coronavirus: La excusa del ‘Cisne Negro’

Imagen de Hedgeye Cartoons

El “solo sé que no se nada” que se le atribuye a Sócrates es, posiblemente, el mejor resumen de lo que vivimos estos días. Lo único que sabemos es que debemos quedarnos en casa y actuar con solidaridad. Pero, ¿os quedáis tranquilos con eso? Yo no. 

Algunos estudiosos, expertos y duchos (o no tanto) en la materia, vienen a tranquilizarnos diciéndonos aquello de: “el CO-VID19 es un Cisne Negro, era imposible de prever”. Con esto, lo único que se busca es que entendamos esta pandemia con resignación, que no busquemos culpables y que seamos más dóciles a aceptar todas aquellas medidas “inevitables” que nos quieran imponer. 

El problema de este intento de contención es precisamente el comienzo, pues no se trata de un suceso Cisne Negro en absoluto. Nicholas Nassim Taleb, padre de este concepto tan utilizado en Economía, hablaba de tres requisitos para hablar de un Cisne Negro: atipicidad o rareza, impacto extremo y predicción en retrospectiva

Empezando por el final, la predicción en retrospectiva supone que “a toro pasado” parece algo sencillo de prever, surgen teorías y demostraciones que parecen explicar su predicción, pero siempre después de que suceda, en ningún caso con prospectiva a que ocurra. ¿Podemos decir que el CO-Vid lo cumple? Sí.

En segundo lugar, poco hay que explicar en la característica de tener un impacto extremo, lo estamos sufriendo ya, pero no es nada con el grave impacto que tendrá en las economías una vez consigamos vencerlo. También cumple este requisito.

Sin embargo, el punto más importante que caracteriza a un cisne negro es el de su rareza o imposibilidad de prever su aparición. Esto desde luego, bajo mi punto de vista, no lo cumple. ¿Por qué?

Existen varios argumentos aquí, pero vamos a quedarnos con uno a nivel nacional y otro internacional. Por un lado, ya en 2017, la Estrategia de Seguridad Nacional de España contemplaba las pandemias como “desafíos que se prevén”, sumado a una lista donde aparecen otros tan conocidos como los movimientos migratorios, la vulnerabilidad energética o el cambio climático. ¿Algunos de estos los catalogaríamos como sucesos imposibles de prever? Se recogen casos como la gripe porcina, el síndrome respiratorio agudo grave, el Zika o el ébola como ejemplos que muestran la debilidad del mundo para la aparición de una nueva pandemia global. 

Por otro lado, encontramos la conferencia de Bill Gates en Massachussets en abril de 2018 ante la Sociedad de Medicina, donde habla claramente de la necesidad de prepararnos para una nueva pandemia. El magnate va más allá y cataloga al ébola de “llamada de atención” y de que el mundo debería prepararse porque la historia nos ha enseñado que sufriremos una nueva pandemia mortal global. 

Ojo, que nadie busque ver estos argumentos como una especie de teorías de la conspiración, como aseveraba Gates, “lo que no podemos predecir es cuándo sucederá”. Por lo que, con esto no podemos catalogar a Bill Gates como mago o brujo, pero sí podemos desechar el argumento de rareza o aticipicidad a la hora de hablar del coronavirus. Por lo que, no podemos hablar de que estemos ante un cisne negro. 

En otra entrada analizaremos la referencia de qué animal nos sirve más para catalogar a este virus, pero lo importante reside en reconocer que no estábamos preparados, que hemos hecho oídos sordos durante su fase de inicio y propagación y que, ahora, los titulares van a buscar utilizar argumentos como el del cisne negro para disminuir un alarmismo justificado y no buscar culpables. 

Esto no ayudará, pero lo que ayudará aún menos será ocultar la verdad a la gente, sea lo dolorosa que sea, tenemos que luchar unidos sí, pero unidos en el conocimiento y veracidad, no en una especie de burbuja donde poco o nada sepamos de la realidad. Ha quedado claro que el desconocimiento no ha resultado positivo. 

“The world needs to prepare for pandemics the way the military prepares for war”. – Bill Gates.

 
1585219357502
Imagen de Hedgeye Cartoons

El “solo sé que no se nada” que se le atribuye a Sócrates es, posiblemente, el mejor resumen de lo que vivimos estos días. Lo único que sabemos es que debemos quedarnos en casa y actuar con solidaridad. Pero, ¿os quedáis tranquilos con eso? Yo no. 

Algunos estudiosos, expertos y duchos (o no tanto) en la materia, vienen a tranquilizarnos diciéndonos aquello de: “el CO-VID19 es un Cisne Negro, era imposible de prever”. Con esto, lo único que se busca es que entendamos esta pandemia con resignación, que no busquemos culpables y que seamos más dóciles a aceptar todas aquellas medidas “inevitables” que nos quieran imponer. 

El problema de este intento de contención es precisamente el comienzo, pues no se trata de un suceso Cisne Negro en absoluto. Nicholas Nassim Taleb, padre de este concepto tan utilizado en Economía, hablaba de tres requisitos para hablar de un Cisne Negro: atipicidad o rareza, impacto extremo y predicción en retrospectiva

Empezando por el final, la predicción en retrospectiva supone que “a toro pasado” parece algo sencillo de prever, surgen teorías y demostraciones que parecen explicar su predicción, pero siempre después de que suceda, en ningún caso con prospectiva a que ocurra. ¿Podemos decir que el CO-Vid lo cumple? Sí.

En segundo lugar, poco hay que explicar en la característica de tener un impacto extremo, lo estamos sufriendo ya, pero no es nada con el grave impacto que tendrá en las economías una vez consigamos vencerlo. También cumple este requisito.

Sin embargo, el punto más importante que caracteriza a un cisne negro es el de su rareza o imposibilidad de prever su aparición. Esto desde luego, bajo mi punto de vista, no lo cumple. ¿Por qué?

Existen varios argumentos aquí, pero vamos a quedarnos con uno a nivel nacional y otro internacional. Por un lado, ya en 2017, la Estrategia de Seguridad Nacional de España contemplaba las pandemias como “desafíos que se prevén”, sumado a una lista donde aparecen otros tan conocidos como los movimientos migratorios, la vulnerabilidad energética o el cambio climático. ¿Algunos de estos los catalogaríamos como sucesos imposibles de prever? Se recogen casos como la gripe porcina, el síndrome respiratorio agudo grave, el Zika o el ébola como ejemplos que muestran la debilidad del mundo para la aparición de una nueva pandemia global. 

Por otro lado, encontramos la conferencia de Bill Gates en Massachussets en abril de 2018 ante la Sociedad de Medicina, donde habla claramente de la necesidad de prepararnos para una nueva pandemia. El magnate va más allá y cataloga al ébola de “llamada de atención” y de que el mundo debería prepararse porque la historia nos ha enseñado que sufriremos una nueva pandemia mortal global. 

Ojo, que nadie busque ver estos argumentos como una especie de teorías de la conspiración, como aseveraba Gates, “lo que no podemos predecir es cuándo sucederá”. Por lo que, con esto no podemos catalogar a Bill Gates como mago o brujo, pero sí podemos desechar el argumento de rareza o aticipicidad a la hora de hablar del coronavirus. Por lo que, no podemos hablar de que estemos ante un cisne negro. 

En otra entrada analizaremos la referencia de qué animal nos sirve más para catalogar a este virus, pero lo importante reside en reconocer que no estábamos preparados, que hemos hecho oídos sordos durante su fase de inicio y propagación y que, ahora, los titulares van a buscar utilizar argumentos como el del cisne negro para disminuir un alarmismo justificado y no buscar culpables. 

Esto no ayudará, pero lo que ayudará aún menos será ocultar la verdad a la gente, sea lo dolorosa que sea, tenemos que luchar unidos sí, pero unidos en el conocimiento y veracidad, no en una especie de burbuja donde poco o nada sepamos de la realidad. Ha quedado claro que el desconocimiento no ha resultado positivo. 

“The world needs to prepare for pandemics the way the military prepares for war”. – Bill Gates.

 
Categoría:
Compartir:
LinkedIn
Twitter
Facebook
Email

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

¿QUIERES APRENDER BOLSA Y ECONOMÍA DE UNA FORMA DIFERENTE?

Suscríbete ahora y recibirás correos con aprendizaje y material muy útil para tus inversiones.

Aprende a elegir un buen broker | ☺

"*" señala los campos obligatorios

Nombre*

¿Quieres aprender Bolsa y Economía de una forma diferente?

Suscríbete ahora y recibirás entrevistas y aprendizaje útil para tus inversiones

Todo sobre finanzas personales en tu email😉

"*" señala los campos obligatorios

Nombre*

Aprende todo sobre inversiones de forma útil y divertida 😉